Cuando la covid-19 aún parecía ser una amenaza lejana, los argentinos nos ocupábamos de múltiples problemas de salud; nuestro brote más preocupante al principio del verano era el de sarampión, por ejemplo; que por suerte no llegó a Tucumán. En esos días, el dengue todavía se haría esperar. Problemas como el sarampión, el cáncer, los infartos, las bronquiolitis o los ACV no han desaparecido; sólo tienen menos prensa. Y algunos de ellos, con altísima probabilidad, van a recrudecer pronto, como las infecciones respiratorias típicas del invierno.
Ayer, después de semanas sin ser mencionado, el sarampión reapareció en la escena. Por suerte en este punto (a diferencia de lo que pasa con el dengue en buena parte del país) las noticias no son malas: el “quedate en casa” está funcionando.
Gracias al aislamiento social preventivo y obligatorio no sólo estamos logrando achatar la curva de covid-19; también los casos nuevos de sarampión bajaron: de los 153 que tuvimos desde la semana epidemiológica 35 de 2019 se produjeron sólo cuatro en los últimos dos meses, informó Analía Mykietiuk, a cargo de la Dirección de Enfermedades Inmnunoprevenibles del Ministerio de Salud de la Nación, durante la cotidiana conferencia de prensa de la mañana. “Pero -destacó-, el sarampión es un tema que sigue preocupando y ocupando al sistema de salud”.
Y como por todos los medios tenemos que impedir que el sarampión (y las otras enfermedades prevenibles por vacunación) agudicen la crisis que generó y que -sabemos- profundizará la covid-19, la clave sigue siendo la vacuna. En ese contexto, Mykietiuk informó también que la semana que viene, las embarazadas y los niños (de entre seis y 24 meses) abrirán la segunda etapa de la campaña de vacunación antigripal.
“Hay que aprovechar las oportunidades de vacunación, así que se buscará que se actualicen y se completen los esquemas previstos por el calendario, y priorizaremos la vacuna contra el sarampión”, agregó.
Estrategias diferentes
“Tenemos que seguir vacunando según el calendario; es importantísimo mantener el programa regular -resaltó Ángela Gentile, presidenta de la Comisión Nacional para la Eliminación del Sarampión, Rubéola y el Síndrome de Rubéola Congénita a LA GACETA-. Pero este año la modalidad deberá cambiarse: tenemos que mantener el aislamiento social, así que es muy importante descentralizar”.
“Por de pronto, hay que evitar concurrir a los hospitales si uno está sano. Y a medida que vayan aumentando las infecciones respiratorias agudas, ahora que vienen los fríos, es probable que haya que implementar la vacunación fuera de las instituciones de salud -aconsejó-. Cada distrito conoce su realidad, y las estrategias seguramente serán diversas”.
En Tucumán
“El brote de sarampión en el país lleva ya muchos meses -recordó Ricardo Cortez, jefe del Departamento de Inmunizaciones del Siprosa-, pero afortunadamente no llegó a Tucumán. Por supuesto, las dosis de la vacuna triple viral (que incluye sarampión, rubéola y paperas) están disponibles como habitualmente, y se esperan nuevas remesas la semana que viene”. Resaltó que fue un éxito al proyecto del AutoVac (“se vacunó un promedio de 700 personas por día”, resaltó) y que el sistema se utilizará también para inmunizar a las embarazadas contra la gripe, desde la semana que viene.
“El grupo de los niños es acotado, no son todos; sólo los que tienen ente seis y 24 meses. Buscamos que se alejen de casa lo menos posible, y que no concurran a los centros de salud. De hecho, por ese motivo no se están haciendo consultas de control de niños sanos”, explicó Cortez, e informó que todas las dosis de la vacuna antigripal pediátricas ya fueron distribuidas en la provincia.
“En esta etapa de la campaña antigripal aprovecharemos para que estos niños completen esquemas de vacunación, para que queden protegidos y minimicemos los riesgos de enfermedades graves”, resaltó.
En cada comunidad -agregó- se implementarán las estrategias ya probadamente exitosas. “En algunas, será casa por casa; en otras se buscará un lugar amplio y ventilado cercano al CAPS, para que la población sana no entre en contacto con potenciales contagios... Los agentes sanitarios conocen su comunidad y están preparados para ayudar a mantener el distanciamiento necesario”, destacó.